Roisin Tully representó a PBI Colombia desde la oficina de Bruselas durante tres años.

Por: PBI Colombia

 

Roisin Tully representó a PBI desde la oficina de Bruselas durante tres años. De nacionalidad irlandesa, cuenta con una maestría en Relaciones Internacionales. Siempre le han interesado los derechos humanos y tras terminar sus estudios le atrajo mucho el papel de los defensores y defensoras de derechos humanos como agentes de cambio en sus propias sociedades y la importancia de apoyar y protegerlos para que puedan llevar a cabo su trabajo con seguridad. Roisin acaba de cambiar PBI Colombia por PBI Estado Español. Aprovechamos para hablar con Roisin sobre la labor de incidencia política que realizó desde Bruselas.

PBI: ¿Inicialmente qué te atrajo a PBI y qué ha cambiado o continúa igual para darte energía en tu trabajo?

Roisin Tully: El trabajo de PBI siempre me ha parecido muy importante pues su modelo permite que los defensores y defensoras, tanto de zonas rurales como de las grandes ciudades, se sientan capaces de seguir con su labor y tengan el respaldo y apoyo de la comunidad internacional de manera visible. Por otra parte, que ese acompañamiento venga reforzado por un trabajo político realizado a nivel regional, nacional e internacional me parece un elemento clave en el modelo de acompañamiento integral que proporciona PBI. Por otra parte, la no injerencia de PBI implica que la organización puede enfocarse solamente en la protección de quienes buscan la defensa de los derechos humanos sin interferencias.

PBI: ¿Cuáles son los logros y avances más importantes que ha alcanzado la organización durante el desempeño de tu trabajo?

RT: Creo que el logro más grande de PBI es poder seguir con su trabajo en contextos que muchas veces destacan por su hostilidad y que las personas y organizaciones acompañadas sepan que cuentan con el respaldo de la organización. Asimismo, la apertura a nuevas zonas[1] muestra la conciencia de la necesidad de adaptarse al contexto cambiante de los países donde trabajamos. El logro más grande de PBI es comprobar que el modelo de acompañamiento internacional funciona en el día a día de nuestro trabajo y que nuestras personas acompañadas dicen que se sienten más seguras con el acompañamiento de PBI.

PBI: ¿Cómo ha cambiado el clima para el acompañamiento en Colombia desde que empezaste con PBI?

RT: La perspectiva hacia Colombia de los Estados miembros de la Unión Europea ha cambiado bastante a lo largo de los últimos años. Antes se expresaba más preocupación por la situación de derechos humanos y la crisis humanitaria en Colombia, pero la negociación del Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Colombia ha influido bastante en dar mucha importancia a consideraciones comerciales en la relación entre ambas partes. Asimismo, el cambio de gobierno en Colombia ha llevado a una opinión más favorable de parte de la comunidad internacional respecto a la actitud de las autoridades colombianas sobre la labor de los defensores y defensoras de derechos humanos. En este contexto resulta más complicado transmitir en Europa la realidad cotidiana de los defensores y defensoras en Colombia, pero todavía hay muchas personas de todos los sectores que mantienen un compromiso muy fuerte con el país.

PBI: Después de varios años de experiencia con PBI en distintas capacidades, ¿qué consideras que necesita el acompañamiento para adaptarse a las dinámicas políticas actuales tanto en Estados Unidos y Europa como en Colombia?

RT: Son las necesidades de las personas y organizaciones acompañadas que guían el trabajo de PBI y, en este sentido, el acompañamiento tanto físico como político ha de adecuarse y adaptarse siempre. El acompañamiento internacional ahora tiene que enfrentarse a retos como las investigaciones y procesos judiciales sin fundamento que tienen el fin de estigmatizar y obligar a las personas defensoras a enfocarse en su propia defensa en vez de poder concentrarse en su trabajo. De igual manera, la deslegitimación en algunos casos del derecho de las víctimas a verdad, justicia y reparación y, a su vez, la estigmatización de quienes defienden este derecho es de suma preocupación y requiere una atención muy cercana para saber enfrentarse a este desafío.

PBI: ¿De qué manera ha contribuido a tu crecimiento como persona (y especialmente a una persona comprometida con los derechos humanos) trabajar en una organización de acompañamiento internacional en el contexto colombiano?

RT: Además de lo que me ha aportado PBI a nivel profesional en términos del conocimiento ganado, también me ha dado mucho a nivel personal. He podido conocer a personas cuyo compromiso con mejorar la situación de derechos humanos en su país, incluso en situaciones de mucho riesgo, me ha dejado una huella duradera. Los abogados, líderes comunitarios, miembros de organizaciones y las comunidades en resistencia que acompañamos en PBI son un ejemplo de valentía y dignidad frente a mil desafíos ¡y muchas veces con un buen humor impresionante!


[1]              Actualmente, PBI está ampliando su labor a Cauca y Valle del Cauca.