Oaxaca.- A raiz de la visita del presidente de México, Felipe Calderón, a Oaxaca el 15 de febrero, se generaron fuertes protestas convocadas por la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en el zócalo de la capital, que derivaron en enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad. Como consecuencia, maestros, activistas sociales, periodistas y varios policías resultaron heridos, entre ellos el líder sindical y ex vocero de la APPO, Marcelino Coache, que fue herido de gravedad.
Ante los hechos, el Comité de Defensa Integral de Derechos Humanos Gobixha A.C. (Código-DH) ha denunciado la fuerte represión de las protestas y el uso excesivo e indiscriminado de la fuerza pública .
PBI quiere mostrar su preocupación por los sucesos violentos que se desencadenaron, y por el estado de salud de las personas que resultaron heridas, en especial por Marcelino Coache. (Ver comunicado de Código-DH).
Coache es uno de los casos emblemáticos de violaciones de derechos humanos en Oaxaca. El líder sindical fue detenido ilegalmente y torturado en marzo de 2009, y desde entonces él y su familia cuentan con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de derechos Humanos (CIDH). El caso de Marcelino Coache lo atiende judicialmente Alba Cruz, abogada de Código-DH, organización a la que PBI brinda acompañamiento internacional en Oaxaca desde su creación en enero de 2011.
Tanto Marcelino como su familia, continúan siendo víctimas de acoso, hostigamiento y ataques, prueba de ello son las últimas amenazas recibidas por el hijo del líder sindical el pasado 31 de enero. (Ver la Acción Urgente de Amnistía Internacional).